“Un mar de colores inundó las calles y de alegres voces
se colmaron las escuelas.”
Amanecer de futuro
Por Armides Campos Mayo
El día 3 de septiembre de 2012
dio inicio el curso escolar 2012-2013 en Cuba. Alrededor de dos millones de estudiantes de todas las
educaciones comenzaron una nueva aventura
ese día. De esta cifra, alrededor
de 350 mil alumnos corresponden a la enseñanza superior, una matrícula que se ha mantenido estable en los últimos años y con una
calidad creciente como resultado de los cambios introducidos en las pruebas
para la educación superior –según afirma Rodolfo Alarcón, ministro de
Educación Superior en nuestro país-.
Cierto es que hay dificultades en el país,
sin embargo, para el inicio de este período lectivo todas las condiciones fueron
creadas, priorizando la base material de estudio necesaria para la óptima
formación de cada docente. Se higienizaron todos los centros del país y se
hicieron reparaciones en aquellos que fue necesario.
No podemos decir que es perfecto –nada lo
es-, pero si podemos asegurar que estos 10 meses serán superiores a los del
pasado año en todos los sentidos, pues se tiene presente que en las escuelas y
universidades no solo se deben enseñar letras y ciencias: en su trabajo se
incluye fomentar en los estudiantes valores éticos, estéticos y patrióticos,
así como crear en ellos el sentido de pertenencia para con la Patria y sus conquistas.
Una escuela es una cantera de futuro:
¡seamos sus creadores!
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